Al aproximarnos al martes, Día de las Elecciones, todos los que estamos asociados con la educación pública –la Mesa Directiva, los padres, los alumnos y los integrantes de la comunidad general de San Diego– estábamos ansiosos e inseguros del destino de la Proposición 30, la medida estatal de impuestos diseñada para añadirle ingresos a la educación y la Proposición Z, la iniciativa del distrito para financiar un bono de construcción de $2.8 mil millones. Ambas medidas se aprobaron a raíz de la generosidad y el apoyo de la comunidad. Así que con un tremendo suspiro de alivio y con profunda gratitud, reconozco este tan definitivo acontecimiento.
La aprobación de la Proposición 30 por parte de los electores de California tiene un impacto inmediato y positivo en el Distrito Unificado de San Diego y a través del estado. El Gobernador no llevará a cabo los recortes automáticos a mitad de año. Si esto hubiera ocurrido, el SDUSD hubiera perdido más de $40 millones del Fondo General y hubiera hecho descansar al personal dentro del proceso de recortar el ciclo escolar por casi tres semanas. ¡Esto NO ocurrirá! Nuestro personal y alumnos continuarán el ciclo escolar planificado sin cambio alguno a su programación y continuarán el éxito académico de un distrito que ahora ha superado 800 en el Índice de Rendimiento Académico. Nuestra esperanza y expectativa es que la Proposición 30 comience a generar ingresos que se utilizarán para compensar por los recortes presupuestarios masivos por los cuales han pasado las escuelas públicas a lo largo de los últimos cuatro años.
Con la aprobación de la Proposición Z, los electores de San Diego les han otorgado un gran y generoso obsequio al SDUSD y a los niños de San Diego. Este obsequio también requiere la gran responsabilidad de nuestro distrito escolar de invertir de manera prudente este dinero de impuestos en proyectos de infraestructura que mejorarán la condición de nuestros planteles y crearán entornos positivos de aprendizaje. En los próximos años, el Distrito Unificado de San Diego se esforzará por demostrarle a la comunidad que su inversión valió la pena; una inversión que tendrá gran rentabilidad para nuestra comunidad por medio de miles de alumnos educados adecuadamente que se beneficiarán cada año de los mejoramientos financiados por la Proposición Z.
De parte de la Mesa Directiva, el personal, los padres y los alumnos, deseo expresarles nuestro agradecimiento colectivo a los electores por afirmarse e invertir de manera prudente en el futuro de nuestros alumnos. Gracias, San Diego, ¡por apoyar a nuestras escuelas y a los niños de San Diego!
Bill Kowba
Superintendente